La espelta o trigo espelta (Triticum espelta) es un antiquísimo cereal cuyas bondades para tu salud se cuentan por docenas. Un aliado saludable que en la última década no para de ascender en popularidad, situándose por méritos propios en la lista de súperalimentos de la que los amantes de la vida sana no apartan los ojos.
Este cereal ya se cultivaba hace 7.000 años tanto en el antiguo Egipto como en la China, país este último en el que no solo era admirado como completo alimenticio sino como ingrediente imprescindible en la fabricación de cerveza. Hasta ellos llegó procedente de Irán.
No dejes pasar la oportunidad de conocer el ‘cereal estrella’ que marcará un antes y un después en tus pautas alimenticias. Sigue leyendo porque la espelta va a demostrarte que no tiene desperdicio.
Tabla de contenidos
¿Qué es la Espelta?
La espelta es un cereal menos popular que el trigo (Triticum aestivum), que algunos consideran una variedad del mismo. Siguiendo esta línea, sería una subespecie del trigo, del que se diferenciaría tanto por su aporte nutritivo (bastante mayor en el caso de la espelta) como por las características de su cáscara (muy difícil de eliminar).
- Cuenta con una riqueza nutritiva y con un valor nutricional únicos
- En plena Edad Media servía para la elaboración del pan de las clases pudientes
- Pese a ello, la evolución de las modernas técnicas agrícolas propició que dejara de cultivarse en torno al siglo XIX, llegando a caer en el olvido
- A día de hoy su cultivo se va recuperando, principalmente en las zonas montañosas de España, Austria, Suiza y Alemania
- Sobresale por su resistencia a las condiciones climatológicas más adversas
- No precisa abonos químicos ni plaguicidas por lo que es un cereal usado en la agricultura ecológica
- Gracias a este tipo de alimentación natural y ecológica su cultivo va in crescendo
- En ciertas zonas se la conoce como trigo salvaje o trigo verde
- Con ella se elabora una comida típica oriental llamada bulgur, consistente en cocer granos de trigo en una parrilla para posteriormente partirlos
Al contrario de lo que ocurre con otros cereales, la espelta aguanta estoicamente las bajas temperaturas y la falta de agua, por lo que su adaptación a las condiciones climatológicas adversas está asegurada, como acabamos de indicar. No obstante, crece mejor en climas con buen tiempo, alrededor de 25ºC, y con una cierta humedad.
Conoce la Harina de Espelta
La harina de espelta, como su propio nombre indica, es una harina que se obtiene moliendo los granos de este cereal. Sobresale por ser un polvo fino muy usado para producir pan, pues hace que este alimento cobre un aroma delicioso y peculiar, cuyo sabor rústico recuerda a los antiguos panes de pueblo.
Es recomendable, a la hora de utilizarla en panaderías, que se combine con harina de trigo, consiguiendo así mejores resultados.
Beneficios a nivel nutritivo
La espelta llama la atención por ser una variedad de trigo muy indicada para el cultivo ecológico, lo que significa que la mayoría de productos elaborados con este cereal que encontramos en las estanterías de los supermercados, proceden de la agricultura o del cultivo ecológicos.
Elevado contenido en carbohidratos, proteínas, vitaminas y fibra
Muchas son las excelencias que se cuentan sobre la espelta, la mayoría de ellas ciertas. Desde el punto de vista de la nutrición, su contenido, con un 75% de carbohidratos, un 15% de proteínas (con presencia de 8 aminoácidos esenciales) y solo un 5% de grasas hace que, comparándola con el trigo común, tenga un mayor porcentaje de hidratos de carbono, más fibra, más proteínas y aporte más cantidad de vitaminas B1 y B2.
Mayor contenido en minerales
Asimismo, destaca su riqueza en minerales, vitales para el óptimo rendimiento diario del organismo, siendo también fuente de calcio, fósforo, magnesio y potasio.
Refuerza el sistema inmunológico. Por encima de su saludable composición, que lo convierte en un cereal aclamado por los nutricionistas, es digno de mención su elevado contenido en lisina, aminoácido esencial del que carece el trigo común.
La lisina es un aminoácido que el organismo no puede sintetizar por sí solo, precisando obtenerlo mediante la dieta. En cuanto al papel que desempeña en el cuerpo es clave, ya que mejora su capacidad de absorción de calcio y ayuda a la producción de las hormonas del crecimiento, sirviendo además para potenciar el sistema neurológico y desarrollar el sistema inmunológico.
Aproximadamente, en cada gramo de espelta se encuentran 40mg de lisina, lo que hace que su aporte sea lo suficientemente elevado para que este solo cereal cumpla prácticamente con las necesidades diarias.
Alivia el estreñimiento. Otra de las diferencias que podemos señalar respecto del trigo común es que las capas externas de la espelta son muy complicadas de eliminar, lo que establece una falta de similitud estructural entre ambos cereales.
Esta dificultad, que tiempo atrás fue vista como un problema, al impedir que el grano fuera refinado, permite que a día de hoy podamos consumir un cereal rico en fibra y especialmente soluble, lo que hace de él un alimento idóneo para las personas que sufren estreñimiento.
Te hará sentir más feliz. La explicación es sencilla. Este cereal cuenta entre sus componentes con triptófano, un aminoácido que se encarga de regular la serotonina, que a su vez es una sustancia química responsable de nuestro estado de ánimo y de nuestra felicidad.
También es fuente de fenilalanina natural, que se transforma en tirosina en el cuerpo, que es precursor de diversos neurotransmisores como la noradrenalina, la dopamina y la adrenalina.
La adrenalina es generada siempre que nuestro organismo a de hacer un esfuerzo grande en un tiempo corto, lo que equivale a decir que la fenilalanina desarrolla una acción directa sobre la energía del cuerpo humano. Y si tienes energía pondrás, ¡al mal tiempo, buena cara!
La Espelta, mejor sin refinar
Que la espelta despliegue todas sus bondades sobre tu cuerpo, pasa porque la tomes sin refinar, usando harina o grano de espelta sin refinar, con el que prepares directamente tus más deliciosas recetas. De esta sencilla manera te estarás beneficiando de un cereal con un contenido considerable en fibra y en proteínas en comparación con otros de los que habitualmente tenemos en la despensa.
Si al final optas por adquirir productos elaborados a base de espelta industrializada, toma al menos la precaución de leer atentamente su etiquetado nutricional, pues de no hacerlo es probable que estás ingiriendo grasas, sal o azúcar sin necesidad, como ocurre con productos elaborados del estilo de panes o galletas.
Otras formas de tomar el cereal de moda
Ya hemos hablado de la harina de espelta. Ahora queremos darte a conocer otras presentaciones de este cereal al que darás distintos usos, siendo algunos de los más comunes los siguientes:
- Granos de espelta. Presentados enteros pueden cocinarse partiéndose, con lo que se reduce el tiempo de cocción, para luego desmenuzarlos e incorporarlos a las ensaladas. La industria cervecera incorporó este grano para conseguir la fermentación allá por 1720.
- Copos de espelta. Desmenuzados, constituyen una opción formidable para papillas y desayunos.
Consumir espelta en forma de germinados te permitirá multiplicar sus nutrientes. ¿Has decidido ya el formato que más se adapta a tu gusto?
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Fuentes:
- EuropaPress
- ¿De qué está hecho mi pan? Amplía información
- Estudio sobre la Espelta
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